eMysteries Toolkit

El presente proyecto ha sido financiado con el apoyo de la Comisión Europea. Esta publicación es responsabilidad exclusiva de su autor. La Comisión no es responsable del uso que pueda hacerse de la información aquí difundida. [Project Number: 2019-1-DE03-KA201-060127] 61 descubrimientos, etc. No olvides que un buen misterio es aquel que oculta uno o varios secretos. Si tu misterio es el crimen de una persona, puedes elegir, entre otros, tres tipos de víctima: • Aquella que se convierte en víctima por casualidad, es decir, que no tiene nada que ver con el antagonista (o sí) y que sufre el crimen porque le ha tocado. • Aquella que gusta a todo el mundo y que no se entiende cómo puede ser víctima. • Aquella que cae mal a todo el mundo y que convierte al antagonista en una persona con la que se puede empatizar. Ideas para pistas de misterio Antes de elegir las vistas de tu historia de misterio, tienes que distinguir lo que es una pista y lo que no. Las pistas son una especie de mapa que guía a los lectores y al protagonista a través de un camino para que lleguen a la solución del misterio. Las pistas son, al fin y al cabo, las pruebas físicas que llevan al protagonista hacia una dirección, pero no lo son situaciones o casualidades que hacen otros personajes, aunque deban tenerse en cuenta. Las pistas pueden meterse en cualquier momento de la historia, incluso al principio, y alguna tendrá que ser la decisiva para solucionar el enigma. En La princesa de hielo de Läckberg hay varios tipos de pistas: a) Hay una evidencia física: un artículo de periódico sobre la tragedia de Lorez cuando el hijo de Nelly Lorez desapareció; una última llamada telefónica hecha por uno de los personajes llamado Dan, una pintura que conecta al pintor con la víctima. b) Una información dada por los testigos: una de las personas a las que Patrick interrogó resulta estar mintiendo sobre un programa que ella dijo que estaba viendo en la televisión. Resulta que no se emitió ese día. Otros personajes afirman haber visto a ciertas personas entrar en la casa de la víctima a cierta hora.